O o…¡cielos!, ahora María José como sabe que soy bien parlanchina… me va a sacar canas, ¡sí!, resulta que ahora quiere que narre una de las anécdotas familiares que le conté cuando me estaba explicando que en su clase estaban estudiando la imagen narrativa, por si no sabes qué es: “es una manifestación expresiva que tiene la facilidad para transmitir mensajes que siempre se ha considerado más apta que la palabra y la letra”. ¡Ajá!, surge porque los seres humanos tienen la necesidad de expresarse, de dejar plasmado lo que sucede en sus vidas, y no sólo ha utilizado la imagen narrativa como manifestación expresiva, sino también “la oral, artística (pintura, escultura…), la visual (cómic, fotografía…), la audiovisual (televisión, video), la de síntesis, escrita” (Peña, Vicente 2000).
Mejor ya empiezo a contarles lo que iba a hacer, es una historia que viene desde uuuuu… muchísimo tiempo, desde mi tataratataratátara tataratísima abuelo, una historia que ha ido de generación en generación, desde los albores de la Humanidad hasta nuestros días, en el que la imagen de síntesis es generada por una computadora.
El tataratataratátara tataratísimaaaaaaaaaa abuelo que les mencioné, se llamaba Ciervochán y vivió en la época del Paleolítico, época en la que la supervivencia “se logró en gran medida a la vida comunitaria, su ingenio, sus descubrimientos técnicos y la capacidad social que desarrolló para comunicar y guardar la memoria de su cultura”. (Sepiensa.org.mx). Una época en la que se comienza a plasmar la historia de los pueblos sobre las cuevas con imágenes de los sucesos, pues de manera gestual, mímica u oral entre ellos, su historia no llegaría lejos… se dieron cuenta que con las imágenes su comunicación se enriquecía y mientras la palabra hablada se esfumaba en el tiempo, las imágenes perduraban con éste.
Cuentan mis ancestros que Ciervochín es así como enamoró a Ríonis, la que sería mi tataratataratátara tataratísimaaaaaaaaaaaa abuela, pues le declaró su amor realizando pinturas rupestres que significaban algo así como “Eres mi puchu, mi carita de mamut, qué cosita tan linda eres”, pues sabía que una imagen puede decir más que mil palabras y que una palabra necesita de una imagen para poder comprenderse, por ejemplo la palabra amor. Creo que así enamoró locamente a mi doñaaa taa… abuela, pues juntos pintaron en las cuevas cada momento feliz y triste que vivieron juntos, y también tuvieron muchos hijitos. Esas representaciones que hicieron los Tatara( x 4) abuelos, son hasta ahora representaciones narrativas (imágenes narrativas) porque hacen evidencia a un hecho que sucedió siendo ellos los narradores y los actores de éstas, y suceden una serie de cosas con una serie de personajes en un tiempo y en un espacio.
Se dice que la imagen narrativa antes que ser una expresión, es comunicación, y nos podemos dar cuenta de eso al momento en el que Ciervochín le declaró su amor a Ríonis de una manera innovadora, y ésta le respondió. Las obras de arte que hicieron en la época de estos “abuelinches” se consideran narraciones icónicas porque son un conjunto de signos que se acomoda de manera determinada con la intención de significarnos algo, nos implica una selección de la realidad. Ahora podremos decir que el amor de los abuelinches era real.
Una de mis amigas imaginarias, Chanchis, me contó que una imagen narrativa se da gracias a la comunicación y la expresión, y no sólo es una imagen fija sino que hace referencia a las narraciones icónicas o visuales, lo que quiere decirnos también que constituye la imagen secuencial la cuál comienza con el cómica, la fotografía, el cine, sigue con la imagen sonora como el radio y vuelve a empezar con las nuevas tecnologías de la imagen y comunicación.
Luego los hijos de los abuelos comienzan a dejar también grabada su historia sobre murales, bajorrelieves o vasijas de cerámica pintadas como medio de expresión.
Hace 5 mil años, imagínate, qué friega, hace un buen, y yo sigo recordando las historias que me cuentan… la familia aunque un poco lejana se interesa por relatar todo lo que les sucede con una sucesión de imágenes.
Unos tíos medio lejanos que vivían en Grecia, también presumieron sobre sus imágenes plasmadas para contar su historia, una famosísimas que podemos observar en el templo en la Acrópolis de Atenas, ahí aparece un friso en el que narran diversos paisajes mitológicos. Y otros familiares romanos presumen las de la célebre columna de Trajano que conmemora las victorias de Roma sobre los dacios, ¡qué fregón!, ¿no te parece?, qué familiares tan inteligentes he tenido en la historia, jajajaja y no es por presumir.
Un dato interesante que me viene a la mente “HORITA” que te estoy contando esto es que la imagen narrativa es un antecedente del lenguaje oral y escrito, es posible que sin la imagen narrativa no hubiera existido la palabra escrita, pues nos ha servido para desarrollar el lenguaje actual, ¡imagínate!, si no hubiera sido por esos abuelinches… tal vez no sería tan “perica” como ahorita y tú no podrías estarme leyendo, ¡qué trauma!, ¿no?
A ver, te explico de manera más fácil, lo que quise decir es que antes en la época de los “abuelinches” utilizaban dibujos para transmitir ideas o mensajes, luego a través de diferentes etapas y generaciones se fueron simplificando cada vez más…hasta llegar a un grafo que es lo que conocemos como palabra y podemos decir que una palabra es una imagen narrativa evolucionada.
La imagen narrativa pictórica se extiende en varias fases, la pictográfica y la ideográfica las cuáles le dieron narratividad a las representaciones visuales. La imagen ideográfica cambio con el tiempo a una imagen más simplificada y sus primeras manifestaciones fue la escritura cuneiforme, seguro te suena porque en tus estudios básicos la estudiaste, pero por si no recuerdas bien es un tipo de escritura se realizaba con líneas en forma de cuñas grabadas sobre tablillas de arcilla que se endurecían y es así como otros parientes lejanísimos, no tanto como los abuelos pero síii uuuufff… comenzaron a escribir.
Ahora para seguir esta historia de los “dibujitos” y su evolución, tambiéeeeeen tengo familiares egipcios, como “la Ra Ra Ra” y el “Brutankamón” que fueron de los primeros que comenzaron a utilizar los jeroglíficos como medio de comunicación escrita visual y ademáaaas descubrieron el papiro, que fue un elemento básico para el desarrollo de la escritura. Pero también en América, los mayas, utilizaron este sistema de visual de comunicación con otro tipo diferente de papel, plegaban varias hojas y formaban los códices en los que se contaban historias con imágenes.
Por cierto, después del papiro apareció el pergamino, gracias al cuál surgen los libros y se crean bibliotecas. También los chinos, como “Chanchicuán”, mi vecino, me platicó que ellos inventaron el papel y también algo que hizo que surgiera después la imprenta, se llama xilografía y consiste en planchas de madera grabadas con tinta oprimirlas sobre el papel para grabar o reproducir.
Unos de los descendientes de los “abuelinches”, “El buen Juano”, que vivió en la Edad Media, una época en la que la imagen adquiere un mayor nivel de comunicacionalidad, fue de los primeros monjes que realizó libros ilustrados, los cuáles nacen con los códices y ahí es donde se comienza a equilibrar el texto y la imagen.
Juano contaba que la Iglesia manejaba todas las representaciones que se hacían, pues mantenía el control y se crearon también los Libros de Horas, Bibliae pauperum en el románico, que eran figuras simples que se utilizaban para enseñar al populacho, porque decían que la imagen está más capacitada para enseñar que la palabra. Por medio de la imagen pretendían exhortar a los fieles a la oración y también para educar a las personas.
En el gótico, nos cuenta que para enseñar al pueblo, la decoración de las catedrales góticas y sus esculturas eran utilizadas para que todos pudieran “leer” y entender el pensamiento medieval, también así conocían a los personajes de a Biblia y se instruían.
¡AZU!, cuántos familiares tengo, esos abuelinches regaron descendencia por todos lados y en todas épocas. Imagínate que hasta el amigo imaginario de Gutenberg, “Gutendork” es mi pariente, ya llegamos a la mejor parte, la que más me emociona, pues en el siglo XVI él inventó la imprenta, ¿te imaginas lo que esto significó?, por fin los libros iban a estar al alcance de todos…yyyyy…comenzaron a aprender a leer y escribir., y obviamente también se aprovechó para enseñar la doctrina cristiana de manera más rápida y a más gente.
En esta misma época, el tío “Gutendork” comenzó a leer ediciones populares condensadas de algunas de las obras literarias más famosas, también se desempeñó la función de periodismo popular en donde se narraban acontecimientos que sucedían.
Ahora sí es tiempo de hablar de alguien mucho más cercano, mis bisabuelos y el siglo XIX, uff…en ésta época se dio el proceso industrial y por lo tanto ya los periódicos y revistas se podían imprimir en grandes tirajes y tenían páginas ilustradas. En ésta época Don Máquino y Doña Tuerca (vivieron como dos siglos), se volvieron fanSSS del cómic moderno, la prensa ilustrada y la fotgrafíaaaaa qué inventos, qué inventos, creo que se sacaron fotos como eternos enamorados haciendo cualquier cara…aún tengo una de ellos guardada. Y finalmente…chá cha cháaan… surge el cinematógrafo, ahora sí se puede reproducir la realidad, donde el espacio y el tiempo adquieren una nueva perspectiva, una nueva forma de narrar.
Los hijos de los hijos de Don Máquino y Doña Tuerca, entre ellos mis papás…estaban impresionados, porque las imágenes narrativas representaban la temporabilidad de las imágenes de forma cronológica… y ahora ya no, el tiempo podía alterarse. Surge la nueva imagen narrativa: la cinematográfica y luego la audiovisual. Ahora hay una nueva forma de narrar.
Y me toca darle fin a este enredo de historias locas y parlanchinerías, hoy en día nos encontramos frente a la imagen de síntesis o la imagen asistida por ordenador, la cuál también entra en el campo de la imagen narrativa.
Tenemos que con la producción de síntesis, la imagen ya no se crea, sino se genera, se construye. Su aplicación puede ser: creación artística, cine, televisión, publicidad, etc. La nueva figura es el artista electrónico, síiii síiiii, ahí entra María José, la que me sacó de su imaginación.
Las nuevas tecnología de la imagen generan mundos posibles para que los usuarios se sumerjan en ellos y se los crea, como ahora tú estás haciendo conmigo.
Para finalizar tenemos que “la imagen oral, visual, sonora y la audiovisual, son interpretadas, la imagen de síntesis es explorada. El relato oral, el icónico, sonoro, audiovisual, en definitiva…la imagen narrativa en cualquiera de sus manifestaciones expresivas…es una construcción narrativa. La imagen de ordenador nos da dos vertientes, una con un componente provocador y otra con un componente provocativo que estimula a los sentidos…
Lo sé…me extendí un poquito, pero bueno, les conté una buena historia con muchas historias inmersas dentro de mi misma historia.
Fuentes y no precisamente fuente con agua:
Peña, T. Vicente. 2000 "Imagen Narrativa": Introducción a la Narración audiovisual. Málaga,. pp 75-93.
Sepiensa. La vida en el Paleolítico. Recuperado el 3 de febrero del 2010 de http://sepiensa.org.mx/contenidos/historia_mundo/prehist/paleolitico/vida/vida_paleo.htm
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Bien MAjo.. padre narrado con propio y original estilo!! y mas relacionar a la Pepa!! con expresiones simbólicas que ejemplifican y visten lo que ibas contando.. ahor ameter links, videos (aunque no salga tu personaje en ellos =))
ResponderEliminarATTE
Tu teacher
Gracias teacher :), lo haré
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